20-N de 1975, ¡¡ Franco HA MUERTO !!

Hoy es motivo de celebración, porque han transcurrido ya 35 años desde que uno de los más crueles dictadores del siglo XX que ha conocido la Humanidad, fue enterrado bajo su losa de 1.500 kilos en el “Valle de los Caídos”, monumento simbólico de época que está situado en el municipio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid-España).

Este monumento que fue construido entre 1940 y 1958, bajo el imperio de su ley marcial y en el que muchos españoles republicanos perdieron su vida, obligados a realizar trabajos forzados en su construcción; perdura vigilante todavía hoy, como tantos y tantos otros símbolos franquistas, recordando toda una época de la historia de España que sumió al país en un ostracismo y oscuridad, todavía hoy no completamente superados, pese al régimen democrático de libertades “vigiladas” que le sucedió.

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Un régimen democrático que todavía hoy sigue sin ser consecuente con la Memoria Histórica, en el que muchos Ayuntamientos se oponen a retirar el nombre de “corte franquista” a sus calles, un país en el que algunas instituciones se siguen negando a condenar al régimen del dictador, un país en crisis en el que con un Gobierno socialista se gasta 100.000 € en abrir un pasadizo junto a la entrada principal de la basílica para facilitar el acceso a la tumba del dictador; y un país en el que muchos españoles siguen buscando el cuerpo de sus familiares víctimas de aquel régimen que contó con el beneplácito y bendición de la Santa Madre Iglesia Católica, Apostólica y Romana.
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Franco en su lecho de muerte

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Muchos eran los chistes de época que corrían de boca en boca entre aquellos ciudadanos que celebraban alegremente y con ilusión, la posibilidad de que la muerte del dictador, diese paso a un régimen de libertades en nuestro país. Chistes como aquel que decía …

“… Franco llega al cielo y encuentra allí a Carrero.
— ¡Chico, qué bien te conservas! ¡Y con corona y todo! —le dice.
— No —responde Carrero—, es el volante; todavía no he podido quitármelo (1).
— Hay que ver, chico —dice Carrero—, ¡cuánto has tardado!
— Sí —responde Franco —, pero tú llegaste en coche”.

(1) Recordemos que Luís Carrero Blanco, presidente del Gobierno de España y uno de los bastiones del régimen franquista, murió en un atentado de ETA el 20 de diciembre de 1973 en la etapa final de la dictadura; y a quien también en los chistes de época le llamaban el “pequeño saltamontes”, porque con 100 kilogramos de goma-2 le hicieron “volar” por los aires hasta la azotea de un edificio anexo a la iglesia donde había asistido a misa momentos antes. Por las calles en esa época se oía también eso de “¡¡Franco!!, ¡¡Franco!!, ¡¡Franco!!, tan alto como Carrero Blanco”.
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Y finalmente, el momento tan esperado ... sucedió. Y pudo cumplirse aquella adivinanza que circulaba entre muchos ciudadanos en la que se trataba de saber con la máxima aproximación el día que dicho evento sucedería:
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"¿En qué día va a morir Franco?

Franco se alzó contra el legítimo Régimen de la II República el .... y la guerra civil terminó el ...; entonces ¡¡Ya está!!":

........18-07-1936

....+ 01-04-1939
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........19-11-1975
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Y la fecha de la adivinanza, no pareció tan desacertada, porque llegó a comentarse que para no dar la razón a la fatídica profecía, los médicos hicieron alargar artificialmente la vida del dictador en sus últimos momentos, ... y ya de paso, la hicieron coincidir con la del aniversario de la muerte de José Antonio Primo de Rivera, máximo líder de la "falange española" que murió un 20-Noviembre.

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Todavía hoy, es mucha la nostalgia que existe de aquella época por quienes se beneficiaron de ella. Pero con nostalgia o sin ella, nada puede evitar la realidad de aquella expresión española de “Muerto el perro, se acabó la rabia”.

Por ello, muchos españoles celebran con júbilo ese día 20-N que marcó el comienzo del fin de una dictadura que tarde o temprano en España dejará de hacer sentir su presencia y hará una verdadera Justicia a su Memoria.